Maduro gana en unas elecciones controversiales, la oposición y la comunidad internacional en alerta
Por: César Rodríguez
En las elecciones presidenciales celebradas el 28 de julio de 2024 en Venezuela, el presidente Nicolás Maduro ha sido declarado ganador para un tercer mandato consecutivo, en un proceso electoral que ha estado marcado por la polémica y el rechazo tanto interno como internacional. La elección se llevó a cabo en un contexto de represión y censura hacia la oposición y los medios independientes, según denuncias de diversas organizaciones de derechos humanos y entidades internacionales.
El principal contendiente de Maduro fue Edmundo González Urrutia, representante de la Plataforma Unitaria, una coalición de oposición. Sin embargo, la participación de la oposición se vio limitada por la descalificación de varios de sus líderes más prominentes, incluida María Corina Machado, quien fue inhabilitada por supuestos delitos políticos, una medida que fue criticada y calificada de injusta por la oposición y varios observadores internacionales.
La jornada electoral estuvo marcada por la ausencia de observadores de la Unión Europea, después de que el gobierno de Maduro rescindiera la invitación previa, alegando que las sanciones europeas contra funcionarios venezolanos eran inaceptables. A pesar de esto, la observación estuvo a cargo de otras entidades como el Centro Carter y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), quienes monitorearon el proceso.
El acuerdo previo firmado entre el gobierno y la oposición en octubre de 2023, que buscaba asegurar garantías electorales y la presencia de observadores internacionales, no fue suficiente para disipar las dudas sobre la transparencia y la equidad del proceso. La oposición ha denunciado múltiples irregularidades, desde la manipulación del registro electoral hasta la coacción de votantes y la falta de libertad para hacer campaña.
La reacción internacional ha sido variada. Mientras algunos países y organizaciones han felicitado a Maduro por su victoria, otros han expresado su preocupación por la legitimidad del proceso. La Unión Europea y Estados Unidos han reiterado sus críticas al régimen de Maduro, subrayando la necesidad de elecciones libres y justas en Venezuela.
En las calles de Caracas y otras ciudades del país, la respuesta de la población ha sido mixta. Mientras los seguidores de Maduro celebran su reelección, los opositores se han manifestado en contra de lo que consideran un fraude electoral. La situación política en Venezuela sigue siendo tensa, y el futuro del país se vislumbra incierto bajo el prolongado mandato de Maduro.
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